Usar Neurostreams™ no es más peligroso que cocinar espaguetis. Y, sin embargo, incluso cocinar espaguetis puede salir tan mal en teoría que toda la casa termine incendiándose. Para evitarlo, pedimos amablemente a todos los usuarios que tengan en cuenta las siguientes precauciones.
Si estás física, mental y emocionalmente saludable, Neurostreams™ puede ser una herramienta valiosa para ti.
Si tienes alguna duda o preocupación, tómala en serio y abstente de utilizar este producto.
Los efectos secundarios van desde “no sentí nada” hasta “estoy reaccionando un poco más lento”, o desde “una agradable sensación de mareo” hasta “wow, hace tiempo que no me sentía tan equilibrado” o “me quedé dormido de verdad”.
Es casi imposible —y poco útil— enumerar todos los posibles (efectos) secundarios. Al fin y al cabo, ¿cuáles son los “efectos secundarios” de la meditación, el yoga o la relajación muscular progresiva? Por lo general, incluyen sensaciones como bienestar, optimismo, claridad mental, atención plena, mayor percepción corporal, ligereza, equilibrio emocional y presión arterial regulada.
Digámoslo así: si puedes manejar el sentirte equilibrado, puedes manejar Neurostreams™.
El efecto más extremo que podrías experimentar en condiciones normales es quedarte dormido sin soñar durante algunos streams —de los cuales despertarás con la misma facilidad que del sueño habitual.
Más allá de eso, se puede afirmar con justicia: Neurostreams™ tiende a generar efectos, no efectos secundarios. Pero si consideras que cualquier cambio mental es dañino por naturaleza, entonces lo mejor es que evites por completo Neurostreams™.
Porque no te equivoques: Neurostreams™ funciona.
El uso de Neurostreams™ no sustituye un tratamiento médico. El creador no afirma curar ninguna enfermedad.